HUELVA, 2 DE AGOSTO 2024.
-“Síndrome de la mano extraña”-
Hay matones y hay pusilánimes, pero el oxímoron arremete contra la personalidad delictiva. Conozco a gente digna y a gente vil, pero es imposible que ambos calificativos identifiquen a un individuo. Existen predicaciones satánicas y decires armoniosos, actuaciones definidoras del okupa de Moncloa. Aunque el demonio se vista con ropas sacras, luciferino se queda. La dignidad de la presidencia del gobierno sólo la encharca el ilegítimo titular de la misma.
Respeto y considero a la fiscalía y a la abogacía del Estado. Ora: García Ortiz y la letrada firmante de la querella del presidente marcan por el síndrome de la mano extraña. El paciente puede matar y descuartizar, pero no siente ni admite que el acto sea ejecutado por su propia mano. Un presidente que convierte la mentira en valor y la política en fulgor sectario suscribe un estado de crisis que desembocará en una revuelta social. ¿Habrá muertos como en Venezuela?
NOTA. Qué nivel el de Sánchez. Qué nivelazo el de la letrada. El primero, indigno, violenta la institución. La segunda, arrastrada, desgracia al cuerpo. El corpus procesal de la querella, bien. El fundamento motivador de la misma, de llanto. Una especie de pandemia jurídico-política sacraliza, a toque de tambor, la muerte de los principios de igualdad, mérito y capacidad. Un levantamiento dialéctico urge. So pena de admitir la indignidad donde sólo cabe respeto…
…Y COROLARIO. La talla ética de Sánchez y de su letrada se sintetiza en una expresión: el pueblo español está a merced de forajidos que roban y lesionan a un ciudadano inerme en silla de ruedas.
RECORDATORIO. A Page, diputados y senadores del PSOE: Llegó la hora de rebelarse contra el jefe de la banda. Ad hominem Sánchez, ley mediante. Justicia por sus delitos.
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