HUELVA, 9 DE SEPTIEMBRE 2024.
Creo que nadie puede poner en duda mi antisanchismo. Mis denuncias contra lo que he calificado como sanchezcracia son diarios y sin medias tintas. No por ello voy a dejar de reconocer el acierto del gobierno de España de acoger en asilo a Edmundo González.
Para mi sorpresa, el Partido Popular ha arremetido con unos argumentos contra esta medida del gobierno de Sánchez que, a mi parecer, son totalmente injustificados e inconsistentes.
Cuando Tellado afirma en su cuenta de X “sacar a @EdmundoGU SIN reconocerlo presidente legítimo NO es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura” exagera, y miente. Es más, se trata de un postureo político inaceptable. La salida de Edmundo González, de hecho, pone de manifiesto el carácter criminal del régimen de Maduro, no le quita ningún problema al sucesor de Chávez.
Otro asunto es la equidistancia y la lenidad con que el ejecutivo de Sánchez se ha posicionado respecto a las fraudulentas elecciones venezolanas, sin reconocer su validez pero también sin reconocer a Edmundo como el auténtico presidente legítimo. Pero para criticar esto no es necesario exagerar ni dejar de alabar una medida tan loable como amparar en España a los venezolanos perseguidos por su oposición al chavismo.
De hecho, el presidente de los Populares, Alberto Núñez Feijóo exigía el 31 de julio la seguridad de los opositores en X “Exigimos que se garantice la seguridad personal de @MariaCorinaYA, @EdmundoGU y resto de dirigentes opositores. Me preocupan especialmente los que permanecen en la Embajada Argentina en Caracas que se encuentra rodeada por fuerzas del gobierno”. Pues Sánchez ha oído sus “exigencias” y lo ha traído a España.
Leopoldo López, otro líder venezolano exiliado, llegaba a España en octubre de 2020 bajo el gobierno de Pedro Sánchez. Entonces, el PP no solo no criticó la medida, sino que la alabó.
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