NO ME HAGO LA IDEA…

Después de haber pasado casi un mes de la muerte de Pepe Ruiz Mesa, no me hago la idea de su pérdida.

Capitán del Decano en los años 60, a donde llegó procedente del Real Betis, con la fuerza de sus 20 y pocos años y el orgullo de haber nacido en el barrio de Triana, del que presumía siempre. Defensa central de los que mandaban en el campo,de los que imponían respeto y daban seguridad. Destacaba de forma sobresaliente, y pronto se ganó la admiración de Huelva entera.

HUELVA, 4 DE SEPTIEMBRE DE 2025

El fútbol fue su camino y también su destino. Por él conoció a Luisina Vides, con quien se casó en Huelva,

y con quien formó una familia de tres hijos: María José, Belén, Luis y seis nietos, orgullo permanente de sus vidas.

En Punta Umbría fue mi vecino durante 40 veranos. Allí, cada mañana, lo veía cuidar con esmero su parcela.

Sus flores crecían entre sus manos, y el seto que flanqueaba el edificio siempre aparecía cortado con una exactitud clamorosa. Era un hombre de costumbres, de esos que no fallan a sus citas.

Hasta el año pasado, ni un solo día faltaba a su encuentro con el mar.

Allí estaba, junto a su amigo y vecino Rafael, bajo su eterna sombrilla, con publicidad de helados “Camy”, hablando de la vida, y sobre todo de fútbol, afición que fue su gran pasión. Este verano su ausencia se notaba en la playa.

Una caída por las escaleras de su casa lo había dejado tocado, pero nadie imaginaba este desenlace. El COVID, al cogerlo debilitado, se lo ha llevado por delante.

Pepe Ruiz Mesa nos deja a los 90 años, con la memoria viva de su fútbol, su amor a Triana, su cariño a Huelva, y el ejemplo de una vida sencilla, llena de constancia y de afectos.

Descansa en paz, capitán.

¡BUENOS DÍAS!